Esta es una de las más frecuente debido a la sobre exposición del cuerpo a la radiación solar. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) esta patología puede desencadenar agotamiento o insolación y agravar el estado de otras enfermedades como las cardiovasculares, respiratorias y renales, así como problemas de salud mental.
En ese sentido el organismo también afirma que los principales afectados son los niños, las personas mayores, los lactantes, quienes trabajan al aire libre y los enfermos crónicos, quienes pueden presentar síntomas como: sensación de debilidad, dolor de cabeza, mareos, pérdida de conciencia, hiperventilación, sequedad y enrojecimiento de la piel.
Para prevenirlo, es importante mantenerse hidratado, evitar la exposición directa al sol durante las horas pico, y usar ropa ligera y de colores claros.
Los mosquitos y otros insectos están más activos en esta época del año. Para prevenir las picaduras, se recomienda usar repelentes, instalar mosquiteros y evitar áreas con agua estancada donde puedan reproducirse.
En verano proliferan los insectos que pueden ocasionar desde síntomas leves, entre esto fiebre o la hinchazón en la zona afectada. Pero hay algunos animales cuya picadura puede causar serias complicaciones a cualquier persona, como una mínima reacción cutánea, hasta una anafilaxia, reacción alérgica muy grave que afecta a todo el organismo y puede, incluso, conducir a la muerte.
En estos casos los doctores recomiendan el uso de repelente, previamente recomendado por un dermatólogo, instalar mosquiteros y evitar áreas con agua estancada donde puedan reproducirse.
Salmonelosis o intoxicaciones alimentarias:
Es importante verificar el estado de los alimentos (sólidos y bebidas) antes de ingerirlo, ya que esto puede descomponerse rápidamente al estar en contacto con temperaturas elevadas y o estar contaminados por enterobacterias del grupo Salmonella.
El cuadro sintomatológico que pueden presentar las personas son: cefalea, náuseas, tos, escalofríos, diarrea o estreñimiento y fiebre.
Es crucial consumir alimentos frescos, lavar bien frutas y verduras, y asegurarse de que los alimentos estén bien cocidos y refrigerados adecuadamente.
Otitis:
Las infecciones del oído pueden ser más comunes debido al aumento de actividades acuáticas en piscinas, ríos o en el mar. Se producen cuando el agua contaminada entra en el oído causando dolor en la zona.
Para prevenirla es importante secar bien los oídos después de nadar y evitar sumergir la cabeza en aguas que no estén limpias.
Cistitis
Se trata de una infección leve, que afecta más a las mujeres, y se produce cuando se aguanta las ganas de orinar. Los síntomas incluyen aumento en la frecuencia de las micciones, dolor intenso en la zona, ardor y dificultad al orinar, fiebre, cuyos síntomas se pueden mitigar al tomar mucho líquido, mantener la zona íntima limpia.
Problemas dermatológicos:
Los hongos en la piel, irritaciones, alergias solares, entre otros son las principales manifestaciones de estas complicaciones que se generan en zonas del cuerpo con mucha humedad o sobreexpuestas a altas temperaturas ambientales, por ello es importante mantener la piel limpia y seca, usar protector solar, y en casos de afecciones más serias, consultar a un dermatólogo para acceder al tratamiento adecuado.