Crédito: Jack Sparrow
El consumo no es igual al consumismo, ni toda adquisición se hace bajo los mismos patrones. A veces se realiza por causas de fuerza mayor, porque no queda otra. En otras ocasiones, se hace por hedonismo, por darse el gusto, aunque se sabe por anticipado, que no se repetirá en un tiempo considerable. Y otras, por compulsión, que puede ser una patología seria que amerita diagnóstico, reconocimiento, tratamiento y acompañamiento.
¿Para qué sirve saberlo?Durante 2020 hubo muchas reflexiones sobre lo que es el consumimos. Es, por decirlo así, un tema en el tapete. La gente se dio cuenta de sus compras adictivas y una interesante cantidad de ella ha traducido eso en algo más interno. Las razones medioambientales priman, pero también las espirituales. La cosmovisión capitalista estimula el consumo frenético y, si bien no se ha detenido, ha desacelerado en algunos rubros.
En este “renacimiento” hay de todo, anti-consumismo fundamentalista y también consumo consciente. Este último nos puede ayudar a mejorar la estrategia de ventas de nuestros productos y servicios. Debemos saber que a partir de ahora hay un importante segmento que necesita más información sobre lo que ofrecemos, es más crítico y más frontal. Ya no compra porque quiere, sino porque es necesario. ¿Te encuentras en este ámbito?
Crédito: Gustavo Fring
¿Cuánto compraste en 2020?
Más allá de la crisis económica planetaria, cada uno de nosotros adquirió bienes y servicios todo un año. Y mientras lees esto, lo haces. Sin estimar las cifras, de seguro todos compramos algo. Vale saber qué devolverías, de cuál compra te arrepientes y cuál fue tu experiencia emocional tras algunas compras. ¿Fuiste bien atendido? ¿aún sigues pagando por alguno de esos bienes? ¿de qué te perdiste? ¿cómo eres al comprar: impulsivo, analítico; crítica o influenciable?
Las respuestas servirán para saber en qué medida tus hábitos de consumo afectan tus hábitos de oferta. Es una herramienta más de las muchas existentes para mejorar tu performance, pero sin duda, también sirve como un mecanismo para meditar sobre nuestra responsabilidad con el planeta y con nuestro entorno más cercano.
(*) Marsolaire Quintana es escritora y experta en comunicación corporativa