Solo para citar algunas cifras, la cita de Maracaibo batió varios récords, como por ejemplo que logró reunir a 200 delegados y más de 400 asistentes, quienes, durante 5 días de deliberaciones, analizaron descarnadamente la realidad del país, pero también plantearon soluciones, como es el gran valor de los gremios.

No todo se redujo a una queja, sino que junto con el problema se presentó la solución al mismo en cada una de las áreas.

En el interior

Otro aspecto a destacar de este evento fue precisamente que se logró hacer en el interior del país.

Debido a tantos problemas derivados, entre otras cosas de la pandemia, se había evitado realizar las asambleas en el interior, pero, además, el problema de la gasolina, los apagones y otros tantos que aquejan a los estados de Venezuela.

Entrante y saliente

La elección de la directiva hasta el 2025 también fue otro aspecto a resaltar, puesto que, a la presidencia saliente, encabezada por Carlos Fernández le tocó atravesar uno de los períodos más rudos no sólo para el país, sino para el sector productivo de la Nación.

Con un mensaje conciliador, Fernández pudo abrir el camino hacia varios temas que son importantes para el empresariado, como es el acercamiento con el Ejecutivo, iniciado más activamente en las reuniones de la OIT por Francisco Martínez, en el entendido de dejar las ideologías de lado, para coincidir en que se necesita de todos para sacar a Venezuela adelante.

La Directiva entrante tiene varios retos que superar, luego de una elección un poco afectada por los ataques personales.

Pero, dejando el tema aparte, el discurso de Adán Celis ha sido contundente, por la firmeza ante las sanciones con las cuales el empresariado no puede estar de acuerdo.

Indica Celis que no solo por lo antihumano, sino por las consecuencias que ha tenido sobre el país, sobre todo contra los que menos tienen, señalando más, que “se considera alguien desubicado adentro de los gremios, plantear las sanciones.”

A la directiva encabezada por Celis le toca también exigir los cambios que se necesitan para el crecimiento del país como la reducción del encaje legal y la eliminación o reducción del IGTF y los obstáculos arancelarios bajos, que tanto daño hacen.

El tema de las importaciones sin control, los impuestos demasiado altos, las fallas en los servicios y así tantos aspectos que se tienen que resolver entre elector público y el privado.

Igualmente, tendría que trabajar en pro de que las fincas, tierras, inmuebles y empresas expropiadas vuelvan a sus dueños o al sector privado, para levantar la creación de empleos y, por ende, el desarrollo de Venezuela que tanto anhelamos.

Redes:
@tomassociasoficial
En Instagram, Facebook, Twitter, Linkedin, Telegram, You Tube y Tik Tok.