El delicioso sabor de las sobras navideñas para comer hasta enero

GÉNESIS REYES

30/12/2018 12:00 am



La temporada navideña venezolana se caracteriza por la alegría, el sonido de las gaitas y por su variada tradición culinaria, la cual está llena de exquisitos platillos preparados especialmente para esta temporada. Y es que en cada hogar, los venezolanos preparan grandes banquetes para disfrutar de las fiestas en compañía de sus seres queridos. Sin embargo, después de las celebraciones, suelen quedar sobras.


La conservación es tan importante como la elaboración, es por eso que al guardar los restantes de la cena navideña, se deben tener en mente algunos métodos para conservar los alimentos, de manera que estos perduren y mantengan su sabor por un mayor tiempo. Además, preservar de manera correcta los alimentos, ayuda a evitar intoxicaciones alimentarias, así lo explica el chef, Dorbennys Roa.

El experto indica que “lo más recomendable es consumir las sobras en al menos dos o tres días. Sin embargo, de no ser este el caso, lo mejor es congelarlos inmediatamente”, añadió que para el proceso de conservación se pueden emplear recipientes o bolsas de sellado hermético, las cuales “evitan la proliferación de bacterias, al aislar el contacto de los alimentos con el oxígeno”.

Roa recomienda utilizar recipientes plásticos para guardar las sobras, debido a que estos no afectan la integridad de las mismas. “En el caso de los enlatados, es mejor mudar los alimentos a contenedores de vidrio o plástico, pues las latas se oxidan con rapidez una vez que se ha abiertas”.

Resalta que, antes de conservar los alimentos se debe identificar la duración de cada uno de ellos, “por ejemplo, la ensalada de gallina, la cual es de corta duración, es mejor consumirla poco tiempo después de su preparación”.

En cuanto las carnes, el chef reitera que lo que “conservarlos al frío es lo mejor y más sencillo, pues puede hacerse en un refrigerador convencional”.

Con respecto a las simbólicas hallacas, Roa señala que existen varias opciones “Si fue previamente cocida, lo mejor es calentarla y servirla enseguida, en cambio, si sobró una recalentada, lo mejor es hay que escurrirla, dejarla enfriar por media hora y luego guardarla en la nevera, además se puede congelar cruda, pero esto hará que al cocinarla la cocción sea más larga”.

Recuerda que antes de consumir los alimentos, estos deber ser recalentados y “si se percibe que aluna comida ha cambiado de color, tiene viscosidades u olores sospechosos, es mejor desecharlos, pues esto significa que está descompuesto. Aseguró que en ocasiones los alimentos que se guardan en el refrigerador “se pierden, porque algunos llegan a cansarse del recalentado y prefieren comer algo más fresco”. 

Sin embargo, el experto afirmó que existe una gran variedad de recetas en las cuales se pueden utilizar los sobrantes de la comida navideña. “Platillos como el pernil es buen acompañante para el arroz, cuando se prepara desmenuzado y bien condimentado; también puede bañarse con una buena salsa y quedará excelente con la pasta. Además es un exquisito relleno para las arepas y sándwiches”, señala.

En el caso del pan de jamón, “este puede ponerse a la plancha y agregar otros ingredientes como pimentón rostizado, tomate y aros de cebolla o preparar una mantequilla al ajillo para untarla. Lo más importante es la creatividad al momento de cocinar”, concluyó.