Nuestra salud mental frente a la crisis
La Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió que la pandemia declarada por el Covid-19 trae consigo algunos trastornos de salud mental, los cuales pueden tener un impacto muy grave para la sociedad

ESTAMPAS

26/03/2021 06:00 pm



Consuelo Fermín

Luego de transcurrir un año en que la OMS declaró la pandemia mundial por causa del Covid- 19, los titulares de la prensa mundial no dejan de reseñar el aumento de las tasas de suicidio, del estrés, la ansiedad, pánico y angustia, así como otros padecimientos mentales que afectan nuestro bienestar. Ya se aprecian los vestigios que trajo consigo el letal virus.

En este contexto, frecuentemente escuchamos entre nuestros conocidos, que se sienten angustiados por el porvenir, no saben hacia dónde puede llevarnos esta crisis. Otros manifiestan dolencias, sin saber a qué se están enfrentando.

Por lo general, los síntomas más comunes de estos padecimientos mentales son:

▪ Cambios bruscos en nuestros estados de ánimos, tales como tristeza, desasosiego, preocupación, frustración, enojo, temor.
▪ Poco interés por el trabajo, estudios, rutina diaria, salud, cuidado e higiene personal diaria, entre otros.
▪ Cambios en los niveles de apetito. Referido a comer en grandes cantidades o simplemente no comer.
▪ Poca energía para realizar nuestras actividades diarias.
▪ Dificultad para tomar decisiones o concentrarse en las tareas diarias.
▪ Dificultad a la hora de dormir.
▪ Reacciones físicas en nuestro organismo como dolores de cabeza y en nuestro cuerpo, sensación de hormigueo en las manos y pies, problemas estomacales, sarpullidos.
▪ Declive en los problemas de salud crónicos.

Para enfrentar estos niveles de angustia, muchas personas han decidido consumir antidepresivos y ansiolíticos, sin prescripción médica. Este hecho, ha contribuido a un repunte en el consumo de estas sustancias, sin saber que:
▪ Causan dependencia.
▪ Una sobredosis de estos medicamentos pueden producir depresión respiratoria, confusión o somnolencia.
▪ Luego de su consumo, interrumpirlo de manera brusca puede causar irritabilidad, somnolencia, ansiedad y problemas de insomnio.
▪ Para poder dejar estos medicamentos se debe hacerlo de manera progresiva.

Es importante resaltar que estos medicamentos, tanto para la ansiedad como para la depresión y otras dolencias son inductores del sueño, es decir son sedantes que causan dependencia, ya que están elaborados con benzodiazepinas, barbitúricos, eszopiclone, zolpidem, y otros. Por lo general, cuando las personas quieren dejar de tomarlos se dan cuenta que presentan dificultad para lograrlo, pues no pueden conciliar el sueño de manera natural, entonces el problema es mayor, pues presentan trastornos por el consumo de estas sustancias.

Estas afirmaciones se fundamentan en las declaraciones realizadas por la vocera del ente rector de la pandemia, la doctora Dévora Kestel, directora del Departamento de Salud Mental y Abuso de Sustancias de la OMS, quien advierte sobre el aumento desproporcionado de la angustia en la población mundial como uno de los mayores problemas que enfrenta la sociedad en salud mental.

Develó algunos datos abrumadores sobre este aspecto: “Un 47% de los trabajadores sanitarios declararon necesitar apoyo psicológico, mientras que un 50% del personal de salud en China sufre depresión, un 45% ansiedad, y un 34% insomnio”.

Para Carissa Etienne, directora de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) “la pandemia de Covid-19 ha causado una crisis de salud mental en nuestra región a una escala que nunca antes habíamos visto”.

Por su parte, la psicóloga Matilde Aguilar, asegura que como consecuencia de la pandemia “ha habido un incremento tanto en el inicio, recaída o desarrollo en el abuso del consumo de sustancias, entre otras afectaciones de la salud mental”. En resumen, la salud mental se ha convertido en un problema planetario.

En cuanto a la salud mental del venezolano, hallamos datos interesantes en el seminario web de Prodavinci “Salud mental y emocional en tiempos de pandemia”, donde participaron la psicóloga Yorelis Acosta y los psiquiatras Javier Guevara y Wadalberto Rodríguez.

Entre los planteamientos realizados por Acosta destaca que “Toda la población va a sufrir alteraciones, angustia, desórdenes del sueño, agotamiento e irritabilidad. Es una respuesta normal ante una situación anormal”.

Asimismo, sostiene que después de cinco meses en cuarentena nacional, se comprobó que los niños y adolescentes “también están presentando trastornos de comportamiento o dificultades para el manejo de las emociones adecuadamente”. Es decir, la salud mental puede verse afectada en cualquier edad.

Y es que nuestras vidas como las conocíamos han sido transformadas bruscamente. De salir y entrar de nuestros hogares, según las necesidades de cada grupo familiar, ha sido reemplazado por el confinamiento. Si requerimos salir, debemos asegurarnos de llevar gel antibacterial, mascarilla, atomizador con alcohol, guantes, y cualquier otro producto que nos garantice estar protegidos del contagio.

Anteriormente, nos levantábamos para ir a nuestros trabajos y ahora nuestras actividades laborales se reducen a una pantalla, otros prefieren optar por el teletrabajo para evitar el contagio. Los niños jugaban y se recreaban con sus amigos en los patios de las escuelas y en la actualidad se ven obligados a estar en sus casas y recibir clases por medio de un computador.

El punto neurálgico radica en que el ser humano psico-biológicamente hablando es un ser social. Su estructura está diseñada para vivir en comunidad, ser interdependiente con otras personas e interactuar con los demás. Frente a esto, ahora la nueva realidad nos impone que debemos guardar distancia social y protegernos hasta de los seres que amamos y eso no ha sido fácil para muchas personas.

En el caso del venezolano, generalmente somos muy sociables, nos gusta abrazar, saludar con besos, estrechar las manos de las personas que apreciamos. Pues ahora resulta una práctica peligrosa para nuestra salud. Se suma a esta nueva realidad la crisis económica, política, social y de salubridad que enfrentamos a diario en el país.

Todo este contexto ha sido caldo de cultivo para que muchas personas se automediquen ansiolíticos y antidepresivos para poder sobrellevar esta crisis. Algunos tratan de conciliar el sueño con estos medicamentos o calmar esa ansiedad que día a día vivimos. Sin embargo, el consumo de estos medicamentos puede ser adverso si no es medicado por un profesional de la salud. Ahora, cabe preguntarse ¿qué hacemos para sobrellevar la crisis de manera saludable? A continuación te proponemos las recomendaciones que refieren los expertos en la materia.


La actividad física es tu mejor aliada para desestresarte 

Para proteger nuestra salud mental debemos tratar de incorporar a nuestras prácticas diarias las siguientes recomendaciones:

▪ Hacer ejercicios dentro de casa
Durante las semanas de confinamiento establece rutinas de ejercicios que te permitan trabajar los músculos y estiramientos. Entre los ejercicios que puede ejecutar son aerobics y yoga. Puedes hacer ejercicios de resistencia, los cuales tonificarán tus músculos.

Cuando empieces hacer ejercicios verás cómo puedes conciliar el sueño y te sentirás más relajado. No obstante, trata de que tus rutinas sean cinco horas antes de dormir o en las mañanas, ya que fisiológicamente tu cuerpo estará activo, así aprovechas esa energía para tu rutina diaria.

▪ Creatividad
Incorporar actividades creativas que estimulen el pensamiento, la creatividad y las reflexiones. Lea un buen libro, pinte, haga manualidades, escriba un diario, realice actividades de jardinería o inicie cualquier actividad que lo relaje.

▪ Establecer rutinas
Trate de organizar sus horarios. Organice su rutina diaria, de manera tal que no se sienta contrariado por todo lo que hay que hacer. Lo recomendable es que:

  1. Levantarnos y acostarnos a una misma hora.
  2. Al levantarse, dedique un tiempo a su apariencia personal, arréglese como si tuviera visitas.
  3. Establezca horarios para las comidas.
  4. Abra un espacio para hacer ejercicios y actividades creativas
  5. Si realiza trabajo desde su casa, cumpla con el horario habitual. No se exceda.


Realiza actividades creativas que despierten tu imaginación 

▪ Dejar los vicios
Durante el confinamiento, al estar en un espacio controlado, puede proponerse dejar el cigarrillo, comer en exceso, dejar las bebidas alcohólicas y todas aquellas prácticas que van en contra de nuestra salud. Más bien incorpore actividades saludables a su rutina diaria.

▪ Busque información de los especialistas
Para sobrellevar la crisis mantente informado y sigue las recomendaciones de los organismos competentes. Lee información de fuentes confiables. Evita leer y escuchar aquellas noticias que te generen angustia. Disminuye tu acceso a las redes sociales.

▪ Contacto social
Si tiene tiempo sin ver o saber de sus familiares, haga video-llamadas y converse con sus seres más queridos. El contacto social es muy importante.

▪ Controle el tiempo que está expuesto a las pantallas
Es probable que con el confinamiento pasemos mucho tiempo viendo televisión o en la PC. También puede ser que estemos con el celular mucho tiempo o jugando videojuegos. Controla la exposición a las pantallas. Busca actividades que te mantengan alerta, creativo. Lee un libro, juega con tus familiares, ejercítate.



▪ Ayude al prójimo
Si usted va de compras, ayude a aquellos vecinos de la tercera edad en hacer sus compras. Busque sentirse útil en la comunidad. Eso lo hará sentirse satisfecho con usted mismo.

▪ No discrimine
Si conoce de algún vecino que esté contagiado, no discrimine su condición. Todos estamos expuestos al contagio.

▪ Cuide su parte espiritual
Contacte a su organización, de manera tal que se sienta fortalecido de manera integral (cuerpo, mente y espíritu)

▪ Busque ayuda profesional
Si usted ha sentido ansiedad, estrés o angustia no dude en contactar a un profesional que lo oriente a enfrentar la crisis.