Hermosos, elegantes y distinguidos, pero…
Con su cola en forma de sable, muy activo y seguro de sí mismo, el dálmata conquista corazones por ser un animal muy amistoso y relajado, pero siempre y cuando se le ofrezca entrenamiento a diario

ESPECIAL PARA ESTAMPAS

15/10/2021 06:00 pm



Siempre se ha escuchado que los dálmatas son una raza canina insoportablemente desastrosa y destructiva, y hasta incontrolable por su fuerza y dinamismo. Por su personalidad juguetona parecieran perros que nunca maduran, pero son perfectos como niñeros porque saben respetar y cuidar a los chiquitos de la casa, al tiempo que pueden servir de animadores y recreadores naturales.


Son estilizados, cola tipo sable y pelo corto pero mullido.  Istock

Juegos de inteligencia

Es obligatorio educarlos desde temprana edad para que sepan los límites en el hogar y aprendan el comportamiento ideal en el grupo familiar, esto debe ejercerse con refuerzo positivo para mejores resultados. Los perros de esta raza tienden a ser muy inteligentes, les encanta estar en compañía y debemos asegurarnos de que socialicen con otras razas desde muy pequeños para evitar inconvenientes cuando estén un poco mayores. Eso ayudará a que fluyan las relaciones cuando salga de casa y se consiga en los parques o en los paseos con otros perros distintos a él.
 
Los juegos de inteligencia cuando todavía es cachorro mejoran y mantienen su salud mental, garantizan su dinamismo sano, aprende la inhibición de la mordida y hasta se puede incluir el saber dónde hacer sus necesidades.
 
Este tipo de juegos estimulan su mente, lo distraen de malos pensamientos que lo incitan a los desastres y se liberan del estrés. 
 
Es obligatorio que ejerciten dos horas como mínimo todos los días. Fotografía IStock  

Se vuelven destructivos cuando…

La acumulación de energía y el ocio es nocivo para esos incansables y nobles animales que requieren un mínimo de dos horas de ejercicio para quemar toda esa felicidad y fuerza que guardan en su hermoso y estilizado cuerpo. De lo contrario, al permanecer todo un día en casa encerrados sin mucho qué hacer, se vuelven destructivos y buscan sacar toda esa energía con lo primero que encuentran a su paso; no perdonarán zapatos, carteras, bolsos, mesas, muebles, mantas, almohadas, juguetes y hasta utensilios de cocina.
 
Quien desee tener de compañía a un dálmata debe tomar en cuenta este punto en específico; disponer de tiempo suficiente para salir con él y pasearlo lo más posible, bien sea subiendo alguna colina, paseando al lado de la bicicleta, corriendo en una cancha o jugando con otros compañeros de su misma raza.
 

Fotografía Pexels 
 
Si vivimos en un apartamento y de pequeños quedamos enamorados con la película 101 Dálmatas con Perdita y Pongo, no dudemos en tener uno, pero pensemos en esas dos horas diarias que de por vida debemos dedicarle para que quemen toda su energía.
 
Si este requerimiento está bajo control, otros detalles a los que hay que ponerle atención es a una posible sordera, ceguera o cálculo renal. Esto, debido a la consanguinidad a la que esta raza había sido sometida por años, haciéndola propensa a sufrir estas enfermedades.
 
Entonces, disfrutemos de Perdita o Pongo, pero con mucha responsabilidad para alcanzar felicidad plena.