El romance andrógino de Enrique Ramil: “Cantar es lo único que me hace feliz”
El cantante español estrena Mentira, una balada pop donde muestra su crecimiento como intérprete y su teatralidad en el escenario

ESTAMPAS

14/02/2021 05:00 am



José Rafael Rodríguez (*)


Los tiempos adversos que corren, no han impedido que muchos artistas sigan presentando proyectos novedosos. Una gran camada de cantantes venezolanos radicados en diferentes partes del mundo nos sorprenden vía Whatsapp o a través de Youtube, con grabaciones musicales y videos de altísima calidad.

Y los hermanos Santiago Castillo y Luigi Castillo, integrantes de la agrupación “San Luis”, quisieron ir un poco más allá y fundaron ahora su propia compañía discográfica, Castillera Music, que permite proyectar nuevos talentos, presentarlos al mundo y vestirlos con ese traje “musical” justo a la medida.

Tal es el caso de Enrique Ramil (@enriqueramil) , joven cantante español quien tras hacerse ganador de la edición 2020 del programa “Tierra de talento”, transmitido por Canal Sur, fue contactado por el equipo de trabajo de Castillera Music en conjunto con la productora venezolana AGTE Live, para incorporarlo a su staff, como nuevo talento.

Enrique, de 36 años y con un recorrido musical de más de 15 años como corista, solista y coach vocal, tiene una potente voz y una presencia escénica de gran fuerza teatral. Su estilo excéntrico y desenfadado lo ha madurado. Él se ha inspirado en los performance de las divas del jazz y en las divas hispanas de la canción romántica. Aún no puede creer que haya llegado el momento soñado para su internacionalización, bajo la batuta de expertos venezolanos radicados actualmente en Miami.


Siempre trata de entender la canción como un guión de una obra de teatro que dura 4 minutos

“Cuando llegué al estudio en Miami, me di cuenta que todos los que estaban a mi alrededor eran venezolanos. Me encanta eso, porque en mi pueblo, que se llama Ares, (en Galicia), hay mucha gente que emigró a Venezuela. Me contaban, ‘se fue a Venezuela a trabajar’. Hay mucha tradición de gente que se fue a Latinoamérica cuando no había trabajo allá”, explica Enrique acerca de su primera sesión de trabajo acompañado del equipo en el cual destacan, además, Yasmil Marrufo y su manager Frederick Meléndez.

-¿Cómo te llegó el tema ‘Mentira’ y cómo haces para hacer una canción tuya, cómo maduras ese proceso de interpretación?
-La letra la escribió Juan Mari Monte, un compositor español y la música es de San Luis. Siempre trato de entender la canción como un guión de una obra de teatro que dura 4 minutos. Tengo mi coach de interpretación, que es Ángela Conde, y con ella trabajo todo. Yo me formé en teatro y es algo que me gusta, pero trato de no volverme exagerado. Me gusta que la gente cuando vaya a su casa, regrese un poquito más feliz que cuando vino a verme.

Divas de todos los tiempos

-¿Cuáles son tus influencias musicales?
-Descubrí a Ella Fizgerald el día que ella murió, porque el párroco de la iglesia colocó un vinyl. Llegué a mi casa y le dije a mi tío “¿tienes un disco de la que murió?” y me dijo “mira en Antología del jazz”. Mis amigos y yo escuchábamos a las Spice Girls, pero yo también disfrutaba del jazz. He sido muy de divas, tanto de las antiguas como las de ahora. Me gusta Beyonce, Etta James, las divas españolas y latinas que cantan con garra. Mi manager me dice “tú cantas canciones de viejas despechadas” (risas), pero en realidad esa música me encanta. Al principio me costó aceptarme, con lo que mido (1,80 m) y con lo que peso, salir a cantar por ejemplo “La gata bajo la lluvia”, pero ahora lo disfruto.

-Derribaste esquemas con tu imagen y al aceptar sin tapujos tu sexualidad, ¿qué le dices a los niños o jóvenes víctimas del bullying?
-Lo primero que les digo es que el problema no son ellos, que se tranquilicen. Cualquier persona que necesite hacer menos a otra para sentirse bien, tiene un problema grande. El problema no lo tiene la persona a quien acosan o insultan. Lo que te digo es fácil decirlo, pero a mí me ha costado un montón de años entenderlo.


El intérprete de 36 años cuenta con un recorrido musical de más de 15 años como corista, solista y coach vocal

-Te gusta romper esquemas en la moda con colores estridentes, ¿disfrutas de la estética de Almodóvar?
-Depende, porque puede ser que un día vista todo de negro. Me inspiro siempre en el personaje de Agrado cuando dice: “Una es más auténtica cuando más se parece a lo que soñó de sí misma”. Hago lo que me apetece, sin pensar en que va a funcionar o que puede gustar y me ha ido mejor, tanto a la hora de cantar, como a la hora de vestir. Cito mucho a Almodóvar, pero hay otra muy buena de Oscar Wilde que decía “Sé tú mismo, porque el resto de los puestos ya están ocupados”.

-Tu mamá fue conductora de un espacio en televisión, ¿eso marcó tu interés por el medio artístico?
-Mi mamá “Conchi”, ha sido una gran influencia desde chico. Yo veía desde pequeño su programa de radio y su programa de televisión. Ella me educó con la ayuda de toda mi familia, pero sin mi papá. Mi papá se fue cuando yo era muy pequeño, pero no lo eché de menos. Terminaba el colegio y me iba al trabajo de mi mamá, a la tele o a la radio y eso influyó mucho en mi pasión por comunicar. Hay niños que no tienen ejemplo de lo que quieren ser de mayores y yo lo tenía, porque mi mamá era una comunicadora nata y lo sigue siendo. La primera vez que yo canté fue en el coro de la iglesia que dirigía mi mamá.

-¿Cómo abordas los altibajos de la carrera para no afligirte en momentos difíciles?
-No te voy a engañar y decir que todos son caminos de flores, pero la única vez que intenté rendirme, no pude, porque lo único que sé es cantar. Creo que es para lo que yo he nacido, porque es lo único que me hace feliz. Ahora por ejemplo, estoy cumpliendo un montón de sueños.

-¿Cómo asume tu pareja tu fama?
-Mi pareja lo asume bien, porque ya sabía que esto se le iba a venir encima en algún momento, porque es una de las personas que más cree en lo que hago. Es verdad que cuando nos conocimos yo vivía en Londres, cantando en la calle, pero él sabía que en algún momento yo iba a dejar de cantar en la calle e iban a pasar cosas maravillosas. Digamos que la visión de futuro que yo tenía, él también la logró entender y eso ha ayudado a que no tengamos problemas en ese sentido.

Clark Ken y Superman en un solo traje

-¿Qué extrañas de los personajes que realizaste en las noches madrileñas, Pinha Pastori y Cocó Mandala?
-No extraño nada, porque llegó un momento en que entendí ser yo mismo sin necesidad de un traje. Sufrí mucho al principio, porque cuando llegué a Madrid quería comerme el mundo, pero cuando subí al escenario me di cuenta que tenía miedo escénico. No pensé que eso me podía pasar, yo que deseaba toda la vida dedicarme a esto. No extraño nada, porque ahora si me apetece maquillarme me maquillo, pintarme las uñas me las pinto, ponerme una ropa que antes me decían “eso es de niña”, me la pongo. Todas esas cosas que hacía antes en un personaje, las hago ahora sin personaje ni nada. Clark Kent y Superman se fusionaron, no hay separaciones.



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Fotografías Cortesía @blanquisantos
Dasha Parker/ AGTE LIVE ENTERTAINMENT