Adolescentes y sedentarismo
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, la falta de actividad física de los adolescentes pone en riesgo su salud, su corazón y su mente

REDACCION ESTAMPAS

08/12/2019 05:00 am



Los adolescentes de todo el mundo están poniendo en peligro su salud al no hacer suficiente ejercicio para reducir el riesgo de obesidad y enfermedades cardiovasculares, advierte un estudio de la Organización Mundial de la Salud publicado recientemente.


El informe, basado en datos de 1,6 millones de personas en 146 países, encontró que más del 80% de los adolescentes de entre 11 y 17 años no cumplen con una recomendación de la OMS de al menos una hora de actividad física al día.

“Cuatro de cada cinco adolescentes no experimentan el disfrute y los beneficios sociales, físicos y de salud mental de la actividad física regular”, dijo Fiona Bull, especialista en actividad y salud y coautora del trabajo, quien instó a los líderes políticos de todo el mundo a “actuar ahora por la salud de esta y las futuras generaciones jóvenes”.

El estudio analizó a adolescentes en edad escolar durante el período 2001-2016, y sus autores dicen que no hay nada que sugiera que el patrón haya mejorado desde entonces.

Leanne Riley, experta de la OMS en enfermedades no transmisibles, dijo que el comportamiento sedentario puede deberse en parte a la rápida expansión de la tecnología digital que hace que los jóvenes pasen más tiempo entretenidos con teléfonos, tabletas y otros dispositivos.

Consecuencias
La falta de actividad física es un enemigo para la salud. Hace que aumente la obesidad, el sobrepeso, el colesterol o la diabetes. “Digamos que la mayoría de nuestras patologías actuales están producidas por el sedentarismo, incluso el aumento de la mortalidad tiene que ver con esto. Al menos en 26 enfermedades crónicas y frecuentes de nuestra sociedad se pueden curar o prevenir con la realización de ejercicio”, señala José Ignacio Ramírez, coordinador del Grupo de Trabajo en Ejercicio Físico de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria, de acuerdo con la página cuidateplus.marca. com.

La falta de movimiento también puede alterar algunos de los neurotransmisores que se producen en el sistema nervioso, por lo que aumentaría la ansiedad, la depresión o el estrés. “Hay bastante evidencia científica donde el ejercicio físico no solo previene el estrés y la depresión, sino que también ayuda a mejorar el estado de ánimo de las personas”, apunta Ramírez.

El sedentarismo se puede prevenir únicamente a través de la educación y esta tiene que ser en todos los niveles: la familia, el colegio, los medios de comunicación y, en especial, las políticas sociales. Hay que hacerle ver a la gente la importancia del ejercicio físico y las consecuencias que tiene dejar de hacerlo. “Explicar que a medida que pasen los años, se irá engordando, se estará peor y psicológicamente se irá deteriorando”, concluye Ramírez.