Zapatos para caminar: no pensemos en moda sino en desempeño
Antes de salir a ejercitarnos debemos pensar en algunos detalles para optimizar cualquier actividad. Si no queremos volver al sillón con lesiones o malestares, entonces escojamos un calzado que se adecúe a las exigencias según el tipo de pie

ESTAMPAS

08/10/2021 06:00 pm



Sjandra Rendón


Tal vez sea sencillo ponernos ropa cómoda, accesorios fit y unos deportivos para salir a caminar o ejercitarnos; pero no es simplemente escoger zapatos bonitos y llamativos para estas actividades, el tema va más allá.
 
Viéndolo desde el punto de vista de mejorar nuestra salud, no se trata de cómo nos vemos o cómo nos verán los demás; debemos buscar la comodidad que se combine con un estilo práctico que al pisar nos provea de la flexibilidad que necesitamos al poner el talón en el suelo.

Un buen porcentaje de zapatos para caminar que ofrecen las tiendas, realmente no cumplen con los parámetros para tal fin y hay que saber diferenciar los que son para correr, que son muy distintos a los que son diseñados para caminar. Los corredores aterrizan con el pie plano, mientras que los que caminan lo hacen con el talón.


Zapatos ideales garantizan un buen desempeño. Diario información
 
Características básicas

Es por esta razón que los zapatos para caminar tienen cierta elevación o inclinación en la parte posterior que permite hacer estable la puesta del talón en el suelo, otorgando suavidad, acondicionamiento y amortiguación.

Esta misma amortiguación es una característica bastante importante para la punta del pie cuando se impulsa desde el talón hacia adelante para el siguiente paso. Con este elemento también disminuyen los tropiezos, porque las suelas de los zapatos para caminar tienden a ser mucho más lisas que las de correr.
 

Para pie plano, zapatos poco acolchados y buen soporte en el arco. Foto Nutrición 360
 
Es por ello que comentamos en un principio que se evitan las lesiones si escogemos los zapatos correctos para caminar que servirán tanto para senderos, cintas mecánicas, suelos lisos, rústicos o aceras.

Identificar el tipo de pie también es un aspecto que debemos tomar en cuenta, considerando que existen varios independientemente del tamaño. Los tipos de pies básicos son: neutrales, rígidos y flexibles que definen la trayectoria de cada paso. Entonces, si tenemos un par de zapatos con el soporte ideal, podremos tener comodidad en los pies y durabilidad del calzado; ambos sufrirán menos lesiones.
 
Cómo determinar el tipo de pie

Ahora bien, ¿cómo podremos saber qué tipo de pie es el nuestro? Existen algunas formas para ello que luego nos ayuda a encontrar el zapato ideal para nuestras caminatas.
 
Prueba húmeda
Busque un recipiente con agua para que sumerja los pies con todo su peso, busque también unas cuantas hojas de papel color marrón. Coloque en el papel ambos pies mojados y repita hasta tanto la huella quede marcada lo más claro posible. Antes de que la huella se borre debe notar la forma que éste dejará.


Que los zapatos no nos quiten las ganas de caminar. Foto Plantillas Coimbra
 
Neutral. Si la forma que se observa en la zona del arco del pie es una línea de aproximadamente 2.5 centímetros, entonces su pie es neutral. Esto quiere decir que son balanceados y tiene una propulsión casi perfecta con una buena estabilidad, pero si usa un calzado de mala horma, rápidamente sufrirá ampollas y demás incomodidades.
 
Al tener un pie neutral podremos encontrar zapatos sin problemas porque son muchos los que se adaptan a este tipo, sólo debe garantizar que cuando se los pruebe no sienta ni presión ni roce.
 
Rígido. La otra forma que queda marcada en la hoja de papel es un pie con un arco tan alto que no se ve conexión alguna con el área del talón, es decir, que se observan dos partes separadas. Esto lo que significa es que su pisada se da más hacia la parte exterior del pie, tienden a ser estables, pero no absorben bien el choque y al ponerse de pie no se alarga ni se ensancha. ¿Qué tipo de zapato debe usarse? Necesitará unos que sean acolchados que reciban el choque, que le permita al pie deslizarse mejor y que el área alta sea con mayor espacio para que acomode el arco. Se estima que este tipo de pie hace de las pantorrillas un músculo rígido y para ello la recomendación es que el calzado sea de talón un tanto más inclinado o elevado que haga el equilibrio que necesita y aporte el confort al caminar.


Evitamos lesiones si el zapato se adapta a nuestro pie. Runner´s World
 
Flexible. Si la huella que observa es llena, bastante marcada, ancha, un arco grueso y bajo entonces su pie es flexible, plano. Al caminar apoya totalmente la pisada hacia el centro, son inestables, puede aumentar una talla cuando está de pie porque absorbe perfectamente el choque. Para este tipo de pie debemos buscar zapatos que tengan menos espacio entre los cordones y la suela, que no tenga mucho acolchado, pero sí un buen soporte en el arco; esto evitará que se aplanen por completo al caminar.
 
Sabiendo ya qué tipo de pie tenemos, podemos buscar por internet -según nuestra marca favorita- el zapato ideal para caminar y sentir la suavidad y tranquilidad en todo momento. Algunas marcas ofrecen sistemas de ventilación, material gel que dispersa el choque, grafitos que ayudan al pie a que no se apoye hacia adentro, acolchado de aire, forros que ofrecen estabilidad y un sinfín de características que se adaptan a sus necesidades.
 
Lo principal es nuestra salud y una buena pisada nos hará regresar a casa satisfechos plenamente.


Hacer la prueba húmeda nos ayuda a saber qué tipo de pie tenemos. Foto Miss García