Para atender a esta zona del cuerpo haremos temblar nuestra cabeza, como si de un terremoto se tratara, abriendo la boca, cerrando los ojos, dejando que ese temblor incluya orejas, nariz, labios, por unos segundos, para después quedarnos quietos disfrutando de esa sensación de absoluta relajación desde el agradecimiento. También podemos cerrar los ojos y con el cabello suelto intentar tocar por un minuto, 60 cabellos, uno a uno, soltando así todo el estrés. Ideal además para estimular el sueño.

Tauro rige garganta, cuello, cervical
El cuello revela qué tan bien estamos durmiendo, pues al ser la estructura que une la cabeza al tórax nos muestra qué tanto soltamos para descansar.
De las molestias más frecuentes en el cuello se encuentra la tortícolis, siendo común que, por el malestar que produce, dejemos de moverlo como solución, pero es muy importante hacerlo. Así que vamos a sentarnos en la cama con la espalda recta y guiados por la mirada movemos la cabeza del centro a nuestra derecha y luego del centro a nuestra izquierda. Al llegar a cada extremo, y hasta que ya no podamos avanzar más, contamos hasta 10 para iniciar de nuevo el movimiento. También podemos buscar el núcleo del dolor o molestia, presionar con el pulgar por 10 segundos y soltar y repetir varias veces ¡Funciona!

Géminis rige brazos y pulmones
Con los brazos podemos hacer casi cualquier cosa, pues toda actividad manual los implica, por eso los tenemos que atenderlos regularmente. Para ello es importante llevarlos arriba, abajo, estirarlos suavemente y en distintas direcciones.
En los brazos hay puntos de dolor, que en la mayoría de los casos se encuentran en los extensores de la mano, ubicados en el antebrazo, cerca del codo. Esos puntos no duelen hasta que los presionamos. Allí se acumulan las toxinas del exceso del trabajo de manos y brazos. Al presionar durante 10 segundos esos puntos de dolor agudo se soltará el exceso de tensión acumulada en esa zona del cuerpo consiguiendo una sensación de renovación en nuestros brazos.

Cáncer rige pecho, mamas y tracto digestivo
Entre el pecho y el tracto digestivo se encuentra una zona muy energética que solemos llamar plexo solar donde acumulamos emociones y cargas energéticas.
Con nuestras manos estimularemos la zona desde la boca del estómago con movimientos ascendentes hasta llegar al pecho, concentrándonos en nuestra respiración. Con esto elevaremos nuestra energía vital. Si por el contrario nuestra sensación es la de estar acelerados en la vida, o muy estresados, haremos el mismo ejercicio pero con movimientos descendentes.

Leo rige pecho, columna y corazón
El corazón es el rey de nuestro cuerpo. También se dice que el corazón se puede romper o estar contento y que si perdemos la alegría de vivir la amargura se adueña de él poniéndolo en riesgo. Para reconectar con nuestro corazón y alinearnos con sus latidos haremos una meditación para escuchar ese sonido vital. Para ello vamos a buscar un lugar que nos invite a la meditación e intimidad y con la espalda erguida y en silencio, tomaremos 10 respiraciones profundas y disfrutadas y justo al terminar retomaremos la respiración habitual para escuchar nuestro corazón.

Virgo rige abdomen, intestino, vesícula biliar y apéndice
Nuestro abdomen no sólo digiere los alimentos, sino también nuestras emociones. Para despertarlo o hacerlo funcionar vamos a masajearlo imaginando que allí tenemos pintado un reloj, y vamos a pasar nuestra mano recorriendo cada una de sus horas. Pasaremos por las 12, las 3, las 6 y las 9 estimulando así su buen funcionamiento.
Si sentimos miedo, vamos a estimular el abdomen de la misma manera, sólo que al terminar nos colocamos una almohada que nos dé la sensación de peso, para ahuyentar el miedo y sentir confort y paz.

Libra rige el sistema venoso, los riñones, la región lumbar y las glándulas suprarrenales