Consejos financieros para madres emprendedoras
Hace un tiempo me encontré con un concepto que me encantó «Mompreneur» un neologismo que define a un colectivo de madres que a su vez dirigen negocios

ESTAMPAS

07/05/2021 06:00 pm



Paula Vargas

Este hecho no sólo desmonta la creencia de que las mujeres asumimos un único rol, sino que podemos ser exitosas en varias facetas al mismo tiempo.

El emprendimiento se ha convertido en la gran oportunidad de lograr un balance entre el rol de mamá y los negocios. Desarrollar una actividad que te permita tomar las riendas de tu carrera profesional, a la vez que tienes la flexibilidad de atender a tus pequeños es muy atractivo. Aunque requiere dedicación y sacrificio, muchos ejemplos hoy nos dicen que no es imposible.

Desafíos de las madres emprendedoras
Un estudio español realizado en 2015 por la compañía Sage, hace una radiografía de la mujer emprendedora. Plantea que existe diferencias entre las motivaciones de los hombres y las mujeres para emprender. Para mujeres entre 35 y 45 años de edad la decisión de emprender viene motivada por la falta de alternativas en el mercado laboral en el 41% de los casos. Los hombres se van más motivados a emprender por oportunidades mientras que las mujeres lo hacen más por necesidad.



Considero que esto más que ser un inconveniente es en realidad una gran ventaja. Emprender por oportunidad significa depender de múltiples factores externos como condiciones de los mercados, disponibilidad de insumos o quizás aprovechar regulaciones que favorezcan una determinada actividad. Cuando la decisión de emprender viene desde la necesidad impactan factores internos como la creatividad, la resiliencia y la perseverancia. Todos están bajo nuestro control y son determinantes para el éxito de una idea de negocio.

En nuestras conversaciones con madres emprendedoras, hemos encontrado que estas son las 3 áreas que más generan conflicto al momento de emprender:



Manejo del tiempo: El secreto está en saber planificar, exprimir el tiempo y definir las prioridades, que te permitan equilibrar el tiempo dedicado a tu familia y a tu nuevo negocio. Por ejemplo, prueba utilizar el mismo calendario para las actividades laborales y familiares y así, a simple vista, podrás organizarte. Y no olvides reservar un tiempo para ti. Cuídate y no dejes de hacer cosas que te gustan, ya que, para que todo funcione, primero debes estar bien.
 
Encontrar las alianzas correctas: Este puede ser un factor decisivo en el éxito de tu negocio. Reconocer que no tienes que hacer esto sola te ayudará a manejar la ansiedad y te permitirá enfocarte en las actividades en las que puedes agregar más valor. Puedes considerar formar una sociedad o buscar asesoría a través de organizaciones de mujeres emprendedoras, que cada vez son más comunes y te ofrecen múltiples actividades de apoyo.
 
Administración financiera: Esta es una de las áreas que las emprendedoras descuidan con frecuencia. Cuando se comienza un negocio nuestros esfuerzos se dirigen principalmente a las actividades de creación, producción y comercialización, y dejamos de lado la administración de las finanzas porque se siente que es un tema más complejo y que quizás se pueda atender después, cuando el negocio crezca. Este descuido te puede salir muy caro después, por eso es importante que te prepares desde tus primeros pasos como mujer de negocios.



4 consejos financieros para “mompreneurs”

1. Planificación y control: Cuida tu flujo de efectivo, es el rey de los emprendimientos. Separa tu presupuesto personal del del negocio. Crea un fondo de emergencia, con el equivalente de tres a seis meses de tus ingresos para enfrentar eventuales problemas de producción, costos o situaciones externas a tu negocio.
 
2. Edúcate y busca apoyo: Así como hay que buscar herramientas para mejorar nuestras habilidades de negocios, también hay que hacerlo para nuestra educación financiera. Es importante que conozcas del tema, para tomar decisiones más acertada, pero no tienes que especializarte. Busca la asesoría necesaria a nivel contable y financiero, que te ayude a mantener todo en regla.
 
3. Presupuesta tus beneficios: No te olvides de considerar en tus costos los relacionado con tu protección de salud y de vida. Nunca es demasiado temprano ni demasiado tarde para diseñar un plan de retiro y ahorro. Las mujeres tienen en promedio más años de esperanza de vida que los hombres y deben considerar cómo costearse en el futuro.

4. Cuida tu nivel de endeudamiento: No quieras comprar todo en un solo momento, haz una lista de prioridades y, conforme va caminando tu negocio, adquiere lo que necesitas y sé puntual en tus pagos para crearte una buena reputación. La deuda hay que usarla como un trampolín para crecer y no como algo que funcione a tu desventaja.

Ser madre no significa que es imposible emprender, y ser una empresaria exitosa no significa que descuides a tu familia. Se requiere de mucha organización y pasión, pero todo es posible si te lo propones.

Paula Vargas @espacioconvalor / www.espacioconvalor.com