Desde hace más de una década, personalidades de Venezuela y de distintas partes del mundo se sentaron frente a sus cámaras filmadoras para exponer su punto de vista sobre diversos temas, sin ningún tipo de restricciones existentes en la radio, prensa o televisión. Y encontraron en YouTube el medio de comunicación audiovisual ideal para difundir su mensaje, convirtiéndolos en un nuevo tipo de celebridad en la era de las redes sociales: los youtubers.

Un youtuber se define como un usuario que a través de su personalidad se dedica a generar contenido para YouTube, presentando diversos temas a un público específico, con el propósito de lograr la mayor cantidad de suscriptores para su canal y generar ganancias gracias al número de reproducciones que tengan sus videos. 

Este fenómeno ha acaparado la atención de los más pequeños de la casa, ya que ven a estas celebridades de internet como personas cercanas o “influencers”, quienes abordan tópicos que regularmente no conversan con sus padres, docentes ni personas allegadas, sembrando en los infantes un criterio, en su mayoría, no adecuado para su proceso de desarrollo. 

Este proyecto social, en su experiencia con los estudiantes a través de dinámicas y distintos métodos de recopilación de datos, ha logrado hallar información de primera mano, donde la fama, el reconocimiento, la irreverencia y los bienes materiales son los atributos que admiran los niños en los famosos youtubers. 

Recientemente este youtuber publicó un video donde expone su preocupación sobre lo que implica la fama en niños youtubers, porque a su juicio no están preparados para asimilar el acoso de los fans, las críticas de los detractores, la ansiedad de no lograr la cantidad de reproducciones y “me gusta” en un video, y más grave aún, recibir regalos de forma desmedida por doquier, afectando la capacidad de asombro frente a un regalo tan significativo en la infancia como lo es El Ratón Pérez.