La reina de España celebra su ochenta cumpleaños

MAYTE NAVARRO

16/12/2018 12:00 am



Llegó a España como una extranjera que no dominaba el español, por lo que tuvo que estudiar para eliminar el acento foráneo y lo hizo tan bien que hoy apenas se percibe que aprendió el español cuando ya era adulta. Políglota desde muy joven, Sofía Margarita Victoria Federica, quien en su soltería tenía los títulos de princesa de Grecia y Dinamarca, cumplió 80 años.


El árbol genealógico de Sofía la vincula con las principales casas reales de Europa. Sólo por la rama paterna existen diecisiete testas coronadas. Uno de sus bisabuelos fue el príncipe Guillermo de Dinamarca, luego Jorge I rey de Grecia, quien se casó con la gran princesa de Rusia y sobrina del zar; el otro fue Federico III, emperador de Alemania, casado con una hija de la reina Victoria; Ernesto Augusto III de Hannover, su abuelo, contrajo matrimonio con Victoria Luisa princesa de Prusia. 

Su vida no ha sido fácil pues ha tenido que enfrentarse a exilios que la llevaron a vivir a El Cairo, Alejandría y luego a Sudáfrica. Su matrimonio desde hace tiempo es una puesta en escena. En una ocasión y hablando sobre el tema, la reina Victoria Eugenia, esposa de Alfonso XIII de España, abuela del rey Juan Carlos y extranjera también, le comentó: “Los españoles son un desastre como maridos y los Borbón son peores”. Sin embargo esta profesional, como suele calificarla el propio rey Juan Carlos, ha asumido su responsabilidad. 



La princesa Irene, su hermana ha sido un apoyo en los numerosos momentos de soledad, al igual que la música, ya que es toda una melómana y amiga de grandes músicos entre ellos el cellista ruso Mstislav Rostropóvich, a quien acompañó en muchos de sus conciertos por España; y el director de orquesta Zubin Mehta, presente en su cumpleaños.

Conservadora en su arreglo personal, apenas ha cambiado su imagen con el tiempo. Sofía de España ha centrado su interés en la fundación que lleva su nombre y donde desarrolla programas culturales, de salud, medio ambiente y de acción social.

A todo lo anterior se le suma la labor de madre y abuela. Ha querido mantener al clan unido, esfuerzos que se han quedado en el plano oficial, ejemplo de ello es su matrimonio, una relación que ha muerto pero que ella sostiene solo por una razón, evitar que la monarquía española sucumba. Sin lugar a dudas, Sofía de España y Grecia es toda una gran profesional.