Eugenia de York, espontánea y sin patrones

MAYTE NAVARRO

28/10/2018 12:00 am



Aunque siempre ha estado en un plano de menor relevancia, la segunda hija del príncipe Andrés de York y Sarah Ferguson, la princesa Eugenia de York ha estado en estos días sobre el tapete ya que es la protagonista de la segunda boda en la corte de Inglaterra que se celebra este año. Para ello tuvo que solicitar el consentimiento de su abuela Isabel II, reina de Inglaterra.


Eugenia Victoria Helena es también conocida como la princesa millennials, por su presencia en las redes sociales, especialmente en Instagram, donde da a conocer momentos que ella considera entrañables en su vida, ocupa el noveno lugar en la línea de sucesión, tiene una licenciatura en Historia del Arte, por lo que sus primeros trabajos estuvieron vinculados al mundo de las galerías y actualmente trabaja en Londres como directora de Huser & Wirth, firma especializada en arte moderno.

Su actividad en actos oficiales resulta reducida por lo que algunos medios la han catalogado como floja, sin embargo no es así ya que tanto ella como su hermana Beatriz las tareas de representación de la casa real británica resultan limitadas. Ellas saben que no son las más populares y a veces esto se ha convertido en materia de preocupación para ambas.

La boda de Eugenia ha sido un tema que también ha levantado ciertos resquemores entre la gente pues solo en el aspecto de seguridad la suma llega a los 2 millones de dólares.

Esta princesa ha seguido los pasos de otros miembros de la realeza, no buscó su pareja entre los nobles de Europa, ni siquiera dentro de la aristocracia. El nuevo integrante de la familia Windsor es Jack Brooksbank viene de una familia de profesionales que se esmeraron en darle una buena educación a Jack, quien no quiso entrar en la universidad para seguir el camino de la hostelería. Entre los antepasados del joven destaca Stamp Brooksbank, gobernador del Banco de Inglaterra en el siglo XVIII y guarda vínculos familiares lejanos con Sarah Ferguson, madre de Eugenia. 

En la actualidad Jack Brooksbank tiene un futuro dentro de la diversión nocturna londinense, es el representante del tequila Casamigos de George Clooney y es dueño de una empresa que distribuye bebidas. Entre los oficios desempeñados en el pasado figura el de mesonero en diversos bares frecuentados por la realeza y famosos de Londres. Jack Brooksbank ha demostrado tener capacidad para hacer realidad sus deseos.