Rafael Alvarez
Primer regalo financiero para tus hijos - Tu independencia económica futura
Cuando se escucha el protocolo de seguridad, antes de iniciar el vuelo, una de las indicaciones que siempre recibimos es “en caso de despresurización de la cabina se desplegarán las máscaras de oxígeno, hale la mascarilla, colóquela sobre nariz y boca y respire normalmente. Después preste ayuda a quien pueda depender de usted”.
Además de esperar que esta situación nunca te suceda, es posible que pienses que tiene mucha lógica: asegurarte de estar bien primero tú antes de asistir a otros.
En las finanzas ocurre exactamente igual y es uno de los regalos que tus hijos pueden apreciar más, “asegurarte de estar bien tú en primer lugar”.
Muchas veces los padres invierten lo que tienen -y lo que no tienen también- para asegurar la educación y el futuro de sus hijos. En el afán de lograr estos objetivos olvidan algo de vital importancia: su propia independencia financiera presente y futura.
Y es que lamentablemente hoy en día podemos ver que la mayoría de los adultos mayores dependen económicamente de sus hijos. Terminan siendo una carga que les impide lograr su avance e incluso, puede llevarlos a la pobreza.
Naturalmente no es algo que alguien haría con mala intención o de forma deliberada, muy por el contrario, el motivo por el que terminan tan vulnerables y perjudicando las finanzas familiares es el amor por sus hijos.
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Quizás es difícil para ti ver esto en el presente, pero te aseguro que uno de los regalos más importantes que puedes darles a tus hijos es tu independencia económica futura.
Asegúrate de apoyarlos en todo, pero no hipoteques tu propia estabilidad sobre la marcha. Te aseguro que ellos lo agradecerán.
Segundo regalo financiero para tus hijos - Criterio
Durante nuestra vida seguimos patrones que nos sirven de brújula para avanzar. Muchos son los factores que tienen influencia en la manera como actuamos: nuestras vivencias, lo que vimos, lo que escuchamos, las emociones que vinculamos con las situaciones de la vida, la religión, las redes sociales, la sociedad, etc.
Quizás nunca te has cuestionado la manera cómo haces las cosas simplemente porque “así lo hacían en mi casa” o “mi padre así me lo enseñó”. Es natural, necesitamos modelos de referencia para evolucionar.
Sin embargo, como lo único que nunca cambia es que las cosas siempre cambian, no siempre la manera en que “se hacían las cosas en mi casa” es la más apropiada.
Tener el criterio para reconocer cuándo se deben hacer cambios en las finanzas personales, de acuerdo a un contexto determinado, es una de las habilidades más importantes para enfrentar movimientos naturales en los entornos económicos como crisis, inestabilidad o simplemente cambios naturales en el tiempo.
Una decisión puede ser muy acertada en una circunstancia y momento del tiempo o totalmente errada en otra. Por eso más que enseñar a hacer las cosas “porque así lo hacía la abuela o el abuelo” es hacerlas analizando el contexto y reflexionando sobre cuál es la mejor manera de avanzar aunque esto signifique hacerlo diferente.
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Tercer regalo financiero para tus hijos - humildad
La vida puede traernos muchos regalos y sonreirnos. También puede quitarnos cosas y hacernos llorar.
Todo puede variar de un momento a otro sin avisar. Cuando lo malo sucede parece que viene siempre en combo. Saber reconocer las cosas verdaderamente importantes será una enseñanza primordial para el bienestar de tus hijos.
Tener la humildad para aceptar que cuando las cosas van mal hay que hacer ajustes -que muy probablemente no nos gusten- es vital para mantener las finanzas en orden.
De no ser así es probable que los ajustes se tengan que hacer de manera forzosa y provocando peores consecuencias para la familia tanto en lo emocional como en lo económico.
Por eso la humildad es sin duda uno de los aspectos fundamentales para el éxito en las finanzas personales. Aunque parezcan dos conceptos que no se relacionan entre sí la verdad es que aprender a vivir y ser felices con menos es un hábito que, en tiempos difíciles, nos dará tranquilidad a pesar de no contar necesariamente con muchas comodidades. Sería algo así como vivir la abundancia desde la humildad.
Seguramente que todo lo que hicieron tus padres por ti lo hicieron con el extraordinario e infinito amor que te tienen, ¿cuál de estos tres regalos te hubiera gustado recibir? ¿regalarías algo más a tus hijos?
