En nuestro artículo anterior abordamos cómo y por qué empezar a hablar de finanzas con nuestros pequeños. Esta semana profundizaremos más sobre la materia, con algunas estrategias para introducir conceptos financieros básicos en su día a día.
¿Cómo hablar del ahorro?
Aprender a retrasar la gratificación es difícil a cualquier edad, sin embargo, es una habilidad que nos puede acercar al éxito en muchas áreas de la vida. Cuando hablamos de ahorro se trata de no gastar de manera inmediata todo el dinero que se recibe, sino acumularlo para una compra más grande. Este es un concepto que niños entre 3 y 5 años ya pueden manejar. Una actividad para enseñarlo consiste en tomar varios sobres de papel (pueden ser de distintos colores) y pedirle al pequeño que dibuje algo que desee, como golosinas o un juguete, y cada vez que reciba dinero ir colocándolo en los sobres para ir construyendo la meta.
¿Cómo hablar del ingreso?
En lugar de asignarles una mesada, tienes una gran oportunidad de enseñarles a tus niños que el dinero se gana, y no que se obtiene de la nada. Este concepto se puede enseñar a niños en primaria y una forma sencilla de hacerlo es “pagarles” por la realización de distintas tareas en el hogar como sacar la basura, lavar los platos, limpiar o bañar a la mascota.
¿Cómo hablar de los gastos?
El intercambio es quizás el concepto más sencillo de explicar, y puede hacerse desde muy temprano. Va más allá de cambiar dinero por algo, ya que puedes enseñarles a tomar decisiones para que ese dinero se gaste de la mejor manera. Una actividad para transmitirlo consiste en entregarle una cantidad de dinero en el supermercado y dejarle escoger una fruta que deseen comprar con la finalidad de ofrecerle la experiencia de tomar decisiones con dinero.
Concepto adicional: Caridad. Este concepto nos ayuda a crear un paradigma positivo sobre el dinero: que nos permite ayudar a otros. Se puede enseñar junto al concepto del ahorro, creando un sobre adicional para compartir una parte del dinero recibido con alguien que lo necesite.
Aprovecha al máximo los momentos claves para enseñar estos conceptos, ayúdalos a ver las interacciones financieras como lo que son, una parte importante nuestra vida diaria.
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