La familia como clave en la prevención de la diabetes

MARIÁNGEL PAOLINI

11/11/2018 12:00 am



El objetivo principal de la campaña del Día Mundial de la Diabetes de este año, es crear conciencia sobre el impacto que la diabetes tiene en la familia y promover el papel de sus miembros en el manejo, cuidado, prevención y educación de la enfermedad.


La detección temprana involucra a la familia. Una de cada dos personas con diabetes no ha sido diagnosticada y tanto el diagnóstico como el tratamiento tempranos son claves para ayudar a prevenir o retrasar las complicaciones que amenazan la vida del paciente. Si la diabetes tipo 1 no se detecta a tiempo, puede provocar una discapacidad grave o la muerte. Asimismo, muchos casos de diabetes tipo 2 pueden generar severas complicaciones que merman la calidad de vida del paciente y de sus familiares.

Reducir el riesgo de padecer diabetes es una tarea que comienza en casa. Cuando se opta por comer todos juntos, acompañarse en la realización de ejercicios y otras rutinas saludables, todos los miembros de la familia se benefician y fomentan conductas que podrían ayudar a prevenir la diabetes tipo 2 en la familia.

Después del diagnóstico, es esencial que la familia aprenda sobre los riesgos, los signos de advertencia a los que deben prestar atención y lo que puede hacer para prevenir las complicaciones de la enfermedad.

La diabetes es una enfermedad costosa para el individuo y su familia. En muchos países, el costo de la inyección de insulina y el monitoreo diario pueden consumir la mitad del ingreso disponible promedio, y el acceso regular y asequible a medicamentos esenciales para la diabetes está fuera del alcance de una buena parte de los pacientes y esto sumerge a la familia en una espiral de miseria que no para, pues las complicaciones por no acatar el tratamiento son aún más costosas.

Una familia que no entiende la enfermedad y que no sabe cómo manejarla es un riesgo para el propio paciente, por lo que dejarse acompañar por un educador en Diabetes es clave para el manejo asertivo de la enfermedad.

La diabetes no se cura, sin embargo, el tratamiento bien administrado y un cambio en los hábitos cotidianos pueden permitir una vida larga y plena, aún en diagnósticos a temprana edad. Atrás quedaron los tiempos de ver a la Diabetes como una sentencia de muerte, al contrario, las expectativas de vida de un paciente que maneje bien su condición, le permitirá vivir a plenitud por muchos años.

Si usted fue diagnosticada con diabetes gestacional, tenga en cuenta que debe mantener un control anual, en especial luego de destetar a su bebé. Las estadísticas aseguran que muchas mujeres pueden volver a manifestar síntomas después de dos años, por lo que es necesario que luego de la llegada del bebé, la madre pueda mantenerse en contacto con su médico tratante para prevenir y atender síntomas (si llegasen a aparecer).

La diabetes es una enfermedad silenciosa, esto quiere decir que rara vez usted podrá percibir síntomas en los primeros estados de la enfermedad. No obstante, si de pronto comienza a manifestar sed descontrolada, micción frecuente, hambre, cansancio y visión borrosa, es importante que acuda al médico para un chequeo de sus niveles de glucosa en sangre. Esta es la mejor manera de estar atentos a posibles desajustes que puedan alertar a tiempo.

No le tema al diagnóstico. ¡Témale a no recibirlo a tiempo! acuda al médico y permita que su familia sea parte del tratamiento.