¿El matrimonio engorda?

MARIÁNGEL PAOLINI

20/05/2018 12:00 am



Cuando iniciamos la convivencia luego de la boda, nos damos cuenta de toda las vivencias y experiencias que cada uno quiere aportar a la nueva sociedad. Comienza una nueva etapa de negociar como se hacen las cosas más sencillas, hasta aquellas que requieren de acuerdos bien pensados.


Las comidas son una de esas decisiones que se van afinando durante los primeros días o meses de la convivencia y esto, según lo afirman algunas investigaciones, puede influir de manera negativa en el peso de los integrantes de la pareja. 

Un estudio realizado en Reino Unido concluyó que la comida puede convertirse en un elemento central de la relación cuando una pareja se casa o comienza a convivir. Un estudio similar conducido en Estados Unidos y otro en España llegan a la misma conclusión…subir de peso puede ser un comportamiento “contagioso” entre los integrantes de una familia.

Todo comienza por el simple hecho de haber encontrado pareja. Algunas personas consultadas durante los estudios, afirmaron cuidarse más durante la etapa del noviazgo y descuidarse luego del matrimonio. Esto tiene una explicación muy simple, si ya no estás de “cacería” tiendes a ser menos cuidadoso con tu apariencia. 

Esto no significa que todos tendrán que seguir el mismo patrón, algunas parejas encuentran en el ejercicio y el mutuo cuido al otro, una actividad para compartir a lo largo de los primeros años y esto podría revertir algunas estadísticas:

Según las investigaciones, lo común es que la tendencia al aumento de peso afecte a ambos integrantes y no sólo a uno de ellos. La Universidad de Glasgow descubrió que los recién casados ganaban un promedio de 1,5 a 2,5 Kg en el primer año de matrimonio.

Otro hallazgo relevante de las investigaciones, indica que si hay un integrante de la nueva pareja que tiende a ingerir alimentos con mayor densidad calórica, el otro puede comenzar a consumirlos por el simple hecho de querer complacer a su contraparte. La buena noticia es que si uno de los integrantes (generalmente las mujeres) propone hábitos más saludables, ella puede influir en los hábitos de su media naranja, pues suele tener mayor influencia en la compra de los víveres para el nuevo hogar.

Otro aspecto que favorece la ganancia de peso, es el cambio en la dinámica familiar y laboral. El matrimonio suele coincidir con el cambio de la vida de estudiante a la vida profesional, en la que las responsabilidades suelen dejar menos tiempo disponible para la práctica de algún tipo de actividad física.

La edad es un aspecto que influye en estos hallazgos, si la pareja pasa de sus “20´s” a sus “30´s” sin atender que sus cuerpos cambiaron, este puede ser una causa probable para la ganancia de peso. Como se ven todos los días, es posible que ni uno ni el otro lo note, por lo que bien vale la pena estar atentos a ajustar el menú a los cambios inminentes del metabolismo, afirman los investigadores. 

De nuevo, aquí la influencia de uno sobre el otro puede favorecer la práctica de nuevas disciplinas para mantenerse activos, así que este debe ser un asunto a considerar desde el día 1.

Si estás por iniciar tu vida en convivencia, te recomiendo diseñar un plan para mantenerse activos y evitar los efectos que la vida en pareja podría ocasionar de manera casi inadvertida. Hacer ejercicio en pareja y preparar las comidas juntos es una magnifica experiencia que puede hacer la diferencia y revertir las estadísticas.