¿Es octubre realmente un mes Rosa?
Debemos aplicar política propositiva para casos tan delicados como las enfermedades neoplásicas, y hacer el llamado URGENTE a los responsables de la salud en Venezuela

ESPECIAL PARA EL UNIVERSAL

24/10/2021 04:00 am



Marayira Chirinos

Como politólogo, comunicadora, ideóloga del Pensamiento Propositivo, como mujer y por sobre todo por haber sido cuidadora principal de un paciente oncológico, no puedo dejar pasar este mes sin un abordaje minucioso y con mirada puesta en las soluciones sobre el llamado mes Rosa.

El cáncer de mama es un problema de salud pública, prioritario por su magnitud y trascendencia, que amerita de la máxima responsabilidad y compromiso del Estado para disminuir el alto índice de mortalidad.

Existen recomendaciones internacionales con mayor consenso sobre la organización de los programas de detección y políticas para el control de esta neoplasia dirigidas a la organización y el crecimiento de la infraestructura para el desarrollo de un programa nacional de detección temprana, diagnóstico oportuno y tratamiento con calidad óptima, trato cordial y respeto a los derechos de las pacientes.

En el tan promocionado mes rosa, abundan campañas de concientización para prevenir cualquier anomalía que pudiera derivar en cáncer de mama, y para hacer un diagnóstico a tiempo de la primera causa de muerte oncológica en Venezuela. En ella el leitmotiv es “tócate para que no te toque”, pero sabemos que el solo tocarnos no es suficiente.

En entrevista con la doctora Patricia González Álvarez, médico radiólogo especialista en la detección de enfermedades mamarias, se aclara que hay lesiones de menos de 2 cm que no pueden ser detectadas al simple tacto, y sin desestimar la práctica del autoexamen mamario señala que el slogan ideal ha de ser “tócate y hazte la mamografía anualmente, para que no te toque”. Otro punto destacado de la entrevista y necesario para la disertación en este artículo, es la necesidad de hacerse el estudio con tecnología de punta para evitar “falsos negativos”.

Todo lo conversado con la destacada especialista está dentro de la lógica que supone su alto grado de responsabilidad y compromiso con una causa mundial, pero cuando aterrizamos en la realidad nacional nos encontramos con unos costos que exceden en forma exorbitante el poder adquisitivo de cualquier mujer trabajadora en Venezuela, y es allí donde, desde el pensamiento propositivo que invita SIEMPRE a no enfocar nuestra energía en el problema sino en el abanico de soluciones, instamos a quienes tienen la autoridad en materia de salud a hacer de este mes de octubre uno verdaderamente Rosa.

La reflexión sobre las políticas públicas siempre es un asunto de difícil abordaje, sobre todo con mirada propositiva, y aún más en Venezuela donde la política es objeto de animadversión, pero cuando se trata de salud, las rápidas soluciones deben trascender las diferentes corrientes políticas; no olvidemos que la utilidad de la política es amplísima, no solo como disciplina académica y profesional de ejercicio y gestión de poder, sino como acepción positiva de la vida en sociedad, que insistimos, debe conducir a la plenitud y felicidad colectiva.

Está claro que en Venezuela estamos lejos de métodos únicos para hacer política y de establecer esos principios y propósitos para el bienestar de todos, pero conforme al mínimo sentido común y de humanidad básica, debemos aplicar política propositiva para casos tan delicados como las enfermedades neoplásicas; realmente con todo tipo de enfermedades, pero la fecha nos inclina a hacer el llamado URGENTE a los responsables de la salud en Venezuela.

Seamos Propositivos, en salud pública también es posible, sumemos a nuestra campaña anual de lucha contra el cáncer de mama una que brinde a todas las mujeres de Venezuela la posibilidad de hacernos los exámenes de diagnóstico sin los altísimos costos que eso reviste, y así minimizar el número de muertes por esta enfermedad que tiene en su historial testimonios nada rosa. 

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