Cómo fortalece el autocuidado nuestro amor propio
Parecen conceptos iguales, pero cada uno refleja una realidad individual de suma importancia. Descúbrelo en el siguiente artículo

ESTAMPAS

14/02/2021 05:00 am



María Gabriela Esculpi

Cuando hablamos de amor, automáticamente pensamos en nuestra pareja o que no tenemos a nadie con quien compartir de ese modo único que caracteriza a los novios o esposos. La realidad que ocurre es que, muchas veces, en nuestras prioridades amorosas nosotros nos encontramos de último lugar, lo cual puede ser perjudicial en nuestras relaciones interpersonales.

¿Qué es el amor propio?
Este concepto tiene que ver en cómo nos relacionamos con nosotros mismos, siendo esta relación partícipe del cómo interactuamos con los demás. Ante ciertas circunstancias de la vida, el amor propio extrae y refuerza el aprendizaje que nos dejó una situación, en vez de sentirnos culpables y abatidos por el hecho: “es el motor que hace que nos sintamos bien, que nos animemos para acercarnos a nuestras metas y que perdonemos nuestros errores” afirma Mental Madrid.



Una sana relación con nosotros mismos nos asegurará relaciones exitosas, fructíferas y recíprocas, debido a que ese tipo de amor nos hará determinar con quién relacionarnos y qué límites somos capaces de asumir.

El autocuidado como refuerzo de sanación
Ahora bien, tenemos excelentes relaciones personales, pero no nos alimentamos bien, no ejecutamos alguna actividad física, no realizamos chequeos médicos frecuentes, ¿qué está ocurriendo ahí? que no tenemos el hábito del autocuidado.



Ir al médico señala el compromiso que asumes contigo mismo
Como expresa Mental Madrid, el autocuidado va más allá de consentirse o realizar un tratamiento de belleza; este hecho trata de nuestra consciencia con nuestra salud física, psicológica y espiritual. Preguntas como: ¿cómo estoy?, ¿qué necesito? forman parte del autocuidado, donde importan las acciones que te permitirán realizar objetivos concretos que te fortalecerán en diversos aspectos.

En el mismo sentido, dicho portal web habla que el autocuidado también se compone de la búsqueda de la tranquilidad y la calma interior, donde las acciones que realicemos tendrán un papel esencial en nuestra plenitud: bailar, meditar, dibujar, entre otras.



Disfrutar de lo simple también forma parte del autocuidado

¿Por qué el autocuidado y el amor propio deben ir de la mano?
El autocuidado refuerza nuestro amor propio porque nos permite desenvolvernos de mejor manera en la relación que tenemos con nosotros mismos. Por ejemplo, ¿de qué sirve tener excelentes relaciones si no nos preocupamos por ese dolor frecuente que sentimos en un una parte de nuestro cuerpo?, puede ser común estar ocupados, pero es importante apartar el tiempo para poder equilibrar ambas partes que nos permitirá cosechar el éxito que tanto anhelamos.

Se leerá cliché pero, sin salud no hay nada que podamos realizar, y el primer paso está en nosotros asumir la responsabilidad y realizar las acciones que consideremos más efectivas.



¿Cómo nos beneficia el autocuidado?

La psicóloga María Alejandra Sánchez en su cuenta de Instagram @psiconfort enlista los aspectos del poder de autocuidado. A continuación te comento desde mi perspectiva cada uno:

Eleva tu autoestima. El autocuidado nos hace sentir mejor ante lo que vemos en el espejo porque refuerza la visión de que estamos bien.
Te permite conectar contigo mismo. Te permite conocer aspectos de ti que no hubieran sido posible de otra manera.
Incrementa tu productividad. Sentir que estamos tomando acción en nuestra salud nos hace sentir con mejor ánimo ante los retos que nos presente la vida.
Te ayuda a desarrollar fronteras emocionales. Una vez que realizas las acciones convenientes a tu bienestar, aprendes a decir no ante ciertos hechos que sabes que podrían hacerte daño. Empiezas a tomar más de tu vida y lo que haces.
Te enseña a priorizar. Si antes eras lo último que pensabas a la hora de levantarte, ahora adquieres el hábito de realizar acciones que te convierten en el número uno de tu lista.
Refuerza tus recursos personales. Si antes sentías que no podías realizar tal actividad porque te causaba dolor, ahora podrás efectuar acciones que te parecían imposibles por no poner atención en lo que pedía tu cuerpo.